La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha reconocido que estuvo a punto se ser víctima de una agresión sexual en hasta dos ocasiones. Sus palabras han llegado como homenaje a las víctimas de esta lacra en los actos del día contra la violencia de género que ha celebrado el consistorio que gobierna.
Tal y como ha relatado la alcaldesa, en una de aquellas ocasiones un hombre le esperó en la puerta de su casa: "Se reía de mí, me desafiaba y era de gran envergadura", ha relatado ante los asistentes. En aquel momento pudo evitar la agresión porque un joven paseaba por la zona con un patinete y pudo pedir ayuda para que el hombre huyese.
En la segunda, varios hombres salieron de detrás de unos coches y corrieron hacia ella para perseguirla cuando andaba sola por la calle. En aquella ocasión también tuvo suerte: "Apareció milagrosamente un coche de Policía", asegura la regidora. Sus presuntos agresores huyeron inmediatamente.
Esta ocasión ha sido la que ha hecho más mella en la líder de los comunes: "Estoy segura de que me habrían violado aquella noche", ha asegurado visiblemente emocionada.
Lo peor de aquella ocasión, sin duda, fue la postura adoptada por los agentes que, paradójicamente, la habían salvado. En vez de empatizar con la víctima y ayudarla a superar la situación, se dedicaron a preguntarle qué hacía a aquellas horas por la calle, sola y tal y como iba vestida.
Por todo ello, la alcaldesa de Barcelona ha pedido una mayor sensibilización del problema por parte de gobiernos y administraciones, así como un aumento en las partidas presupuestarias para acabar con esta lacra y terminar con el acoso hacia la mujer.
Tras el reciente escándalo de Harvey Weinstein, objeto de denuncias por el supuesto acoso contra varias mujeres del mundo del espectáculo, el número de personas que han denunciado estos hechos ha aumentado. Una lacra que ahora está de actualidad y que ha servido para poner de relieve los problemas que muchas mujeres enfrentan a diario por su simple género.