Tras su polémico divorcio de Brad Pitt, la imagen de la que era considerada como una de las parejas más populares de Hollywood está cayendo completamente en picado.
La última polémica en la que está involucrada, en este caso, Angelina Jolie, llega relacionada con el casting de selección para la próxima película de 'Primero mataron a mi padre', una cinta que quiere rememorar el genocidio camboyano.
El equipo de Jolie se encargó de recorrer los hogares más humildes del país asiático para seleccionar a los niños que probablemente puedan encajar mejor en los papeles de la película.
Querían que fueran lo más humildes y con las experiencias vitales muy duras para imprimir mayor realismo al metraje. Sin embargo, la prueba que realizaron con ellos llamó la atención del público y ha sido objeto de críticas por su "excesiva crueldad".
La prueba en concreto se basaba en poner ante los niños con problemas de todo tipo una cantidad ingente de billetes. Tenían que decir qué harían con todo ese dinero. Cuando habían contestado, les retiraban el dinero y les dejaban solos.
Angelina Jolie se defiende
La actriz ya ha emitido un comunicado en el que niega los hechos y asegura que todo se ha tergiversado: "La insinuación de que arrebatamos dinero real a un niño durante las audiciones es falsa y molesta. Me hubiera indignado yo misma si eso hubiera ocurrido", ha afirmado en una publicación del diario The Huffington Post.
La intérprete confirma que la prueba sí se realizó, basándose en una de las escenas de la película, pero que no se realizó ningún acto que pudiese ser perjudicial para los menores: "Se tomaron todas las medidas necesarias para el confort y bienestar de los niños, empezando por las audiciones, pasando por la producción y hasta el presente".
Las ONG's que trabajan sobre el terreno han criticado la buena relación que Angelina mantiene con las autoridades de Camboya, un país en el que los derechos humanos, en ciertas situaciones, parecen brillar por su ausencia.
