Después de las conclusiones de la Fiscalía ha llegado el turno de la acusación particular. El juicio contra Ana Julia Quezada, autora confesa del asesinato del pequeño Gabriel Cruz, de ocho años, está acaparando toda la atención mediática; y es que podría convertirse en la primera mujer en España sobre la que recaiga la pena de prisión permanente revisable.
Francisco Torres, abogado de los padres del menor, se ha dirigido directamente a los nueve miembros del jurado popular para lanzar su último alegato contra la acusada: "Les pido que no les tiemble el pulso. Ana Julia Quezada no tiene derecho a respirar el mismo aire que nosotros. No puede estar en la calle porque va a matar a niños". "Estoy convencido de que Gabriel no es el primero", ha expresado, en referencia a la muerte de su hija, de cuatro años, en 1996.
El letrado, molesto con las conclusiones de la Fiscalía, que ha insistido en el ataque fortuito de la acusada, ha sido muy contundente insistiendo en que Quezada se ensañó con Gabriel Cruz, que lo apaleó, lo dejó "agonizando" mientras fumaba y finalmente lo asfixió. Incluso ha asegurado que desnudó al menor porque "pretendía descuartizar al pobre angelito".
Para defender esta postura, Torres ha explicado que, a su juicio, no tiene sentido a tesis defendida por Ana Julia según la cual le golpeó con la parte cortante del hacha el brazo derecho del niño porque no cabía en la fosa que había cavado: "El cuerpo no estaba rígido en ese momento. Debieron de pasar 12 horas para que adquiriera rigidez, pero ella está en la finca tres horas y 19 minutos. Por eso nunca ha contestado por qué lo desnuda", ha detallado el abogado de los padres del menor. "Porque ella quería desmembrarlo".
Según la acusación, Ana Julia Quezada premeditó el asesinato de Gabriel Cruz. "Lo lleva a un paraje desértico. La acusada se aseguró de que nadie pudiera ir allí". Torres también ha insistido en la fingida colaboración que la acusada mantuvo durante los 12 días de búsqueda del niño, insistiendo en el daño psicológico y moralcausado a los padres de su víctima: "Su maldad es intrínseca. El daño a los padres, y en especial a la madre, es irreversible, de por vida".
La postura de la Fiscalía
El Ministerio Fiscal ha solicitado prisión permanente revisable para Ana Julia Quezada por el delito de asesinato con alevosía del pequeño Gabriel Cruz. Sin embargo, ha descartado el ensañamiento ya que la prueba pericial de los forenses del Instituto de Medicina Legal (IML) no ha probado que aumentase "de forma inhumana el sufrimiento del menor".
"Es terrible, cruel, a mí, como fiscal, me estremece especialmente la falta de piedad de la procesada, que posiblemente no voy a ver en otro acusado, pero no se puede mantener que hubiese un aumento deliberado de dolor o que hubiese agonía", ha sostenido la fiscal Elena Fernández.
