Achille Lauro tenía ganas de Eurovisión. Luego de un tibio decimocuarto puesto en el Festival de Sanremo con el tema 'Domenica', lo que no sabíamos era que se guardaba bajo la manga la carta de ser la cara más famosa de la primera edición de 'Una Voce Per San Marino', el Sanremo a pequeña escala que organizaron entre la RTV San Marino y entidades locales del microestado.
Con presencia española gracias a la invitación a la canaria Cristina Ramos, la que no entró en el top-10 de la final, 18 artistas (10 invitados y nueve emergentes que se ganaron su plaza tras unas semifinales) buscaron una plaza para un Festival de Eurovisión que se celebrará a solo 460 kilómetros del Teatro Nuovo Dogana, escenario con 600 butacas que albergó el evento.
Entre ganadores de Sanremo como Valeriu Scanu, propuestas electrónicas como las del Dj Burak Yeter o leyendas del italodisco como Ivana Spagna, Achille Lauro se llevó el gato al agua en un certamen que contó con una deliberación total con un 100% de jurado. En tres horas intensas de gala, aderezadas con apariciones de leyendas italianas como Al Bano Carrisi y otras sanmarinenses como Valentina Monetta, San Marino volvió a demostrar que es el país más aleatorio de todos los que forman Eurovisión, llevándose una de las caras más famosas del panorama musical italiano a Turín bajo su bandera.
Cristina Ramos mostró vocals pero pasó desapercibida
La gran sorpresa de Una Voce Per San Marino (además de la presencia de Achille Lauro) llegaba con la confirmación de que la canaria Cristina Ramos había sido invitada para competir. Con apenas una semana y media de antelación, Ramos era confirmada por su presencia internacional en talent shows, habiendo estado en Reino Unido, España, Japón o México en los últimos años.
Para la competencia, Cristina Ramos no se olvidaba de esa mezcla entre la ópera y el pop que tanto le gusta, presentando el tema 'Heartless Game', una composición de Alejandro de Pinedo y Jesús Cañadilla, mismos compositores del 'Algo pequeñito' de Daniel Diges, representante español en Eurovisión 2010.
Si bien su directo fue intachable y su propuesta escénica fue quizá la más elaborada de la noche, su canción no entró entre las diez primeras Pese a todo, para una artista como Cristina Ramos que siempre ha tenido Eurovisión entre ceja y ceja (estuvo entre las candidatas de RTVE para la edición de 2020), esta presentación en sociedad ha sido toda una alegría. En el día en el que cumplía 43 años, Ramos no solo se le vio en San Marino y a nivel europeo, sino que recibió el cariño español al televisarse el evento en vivo también en España.
'Stripper' era la buena (8/10)
La prensa en italia elucubraba que igual Achille Lauro se había guardado la buena bomba para San Marino y no para Sanremo. Y lo cierto es que la probabilidad de ganar Una Voce Per San Marino es mayor que la de ganar Sanremo, y algo nos dice que se guardó el buen tema para la preselección del Titano.
'Stripper' es un concepto más reconocible para Achille Lauro que lo era 'Domenica'. Si bien la canción que llevó al Ariston le jugó bien por su bautismo en plena escena, Stripper le permite pavonearse como él quiere, con el añadido de un toque rock que siempre le viene bien.
Aunque más de uno le haya comparado con Måneskin nada más sacar el tema, lo cierto es que si algo tiene Lauro es personalidad y acudirá a Turín con una propuesta que si está bien vendida puede optar a ser el mejor puesto de la historia de la RTV San Marino en Eurovisión.
Cuando uno tiene un evento en casa, tiene que quemar todas las naves para ir, y es lo que ha hecho Achille Lauro. En una Eurovisión que se está llenando de caras conocidas para los italianos (la victoria de Emma Muscat en Malta también es conocida), Turín tendrá tres anfitriones, ya que a los oficiales Mahmood y Blanco, se les suma el oficioso Achille Lauro. Vayan preparando palomitas que se viene una pretemporada inolvidable.
