"Absurda y sorprendente". Así califica el abogado de la acusación particular, José Barragán, la sentencia que condena a tres personas de un grupo de cuatro por un delito de odio, por gritar a su víctima "maricones os vamos a matar, idos de aquí", manifestaciones que quedan acreditadas, al igual que la persecución... pero no que ellos fueran los artífices de la brutal paliza que recibió la víctima.
Así lo considera el magistrado Eugenio Alarcón, del juzgado de lo Penal 6 de Alicante, sobre los hechos acaecidos el 14 de febrero en el parque del Monte Tossal de Alicante. En el juicio, celebrado el pasado 30 de septiembre, Brayan C.E., Miguel M.B., Adrián S.B. y Samuel G.I. (hay otros tres menores imputados a la espera de ser procesados por la jurisdicción de menores) se enfrentaban a los delitos de odio y otros tres delitos de lesiones leves, lesiones agravadas, un delito de coacciones leves, un delito de robo con violencia en grado de tentativa y un delito de coacciones, tal y como publica El Salto Diario.
Sin embargo, el magistrado Eugenio Alarcón ha adoptado una decisión llamativa. Alarcón determina que los acusados solo deberán pagar una pena de un año de prisión con multa de seis euros diarios durante ocho meses, 1.459 euros; así como indemnizar con 600 euros a cada una de las tres víctimas, incluida la que sufrió la agresión. Alarcón es conocido por otras polémicas, como absolver al ex alcalde de la ciudad, Luís Díaz Alperi, por delito fiscal o firmar decenas de sentencias en un día tras recibir un toque de atención del CGPJ por saturación en el juzgado.
La víctima de la agresión sufrió varias heridas en la pierna y la cadera que precisaron cirugía. Tuvo que ser operado por los golpes que sufrió en el rostro y todavía mantiene pendiente otra cirugía maxilofacial.
El juez no aprecia la agresión
En la sentencia, se considera como hechos probados que las tres víctimas "oyeron gritos como 'maricones os vamos a matar', 'gays de mierda' o 'maricones de mierda, idos del parque'". Cuando vieron que se acercaban, se marcharon hacia otro lugar, momento en el que vieron que "venía corriendo hacia ellos, por lo que también huyeron del lugar corriendo y fueron perseguidos por tales individuos".
Durante la huída, J. R. B. F. se separó y se dirigió hacia un parking, donde llegó hasta un punto donde había una altura que no podía sortear. Cuando se detuvo, fue interceptado por un primer puñetazo en el rostro seguido de varios golpes de, al menos, tres agresores, uno de ellos con un objeto contundente. Una de las otras víctimas declaró que "en la sombra se veían como palos y les lanzaban piedras".
La sentencia indica que "igualmente, el propio J. R. B.F finalmente fue golpeado por un palo", que de hecho se aprecia en las cámaras de seguridad. También, publica El Salto, se ve a uno de los acusados, Miguel M.B. lanzando una piedra que no llega a impactar, algo que el acusado reconoció en vista oral.
El abogado de la víctima destaca que la grabación muestra como los chicos están detrás de la víctima y llegan hasta el parking, pero que las imágenes captadas recogen sus siluetas en pequeñas dimensiones. El juez considera que no se aprecia.
La Policía Nacional también investigó los móviles de los acusados, con una conversación de WhatsApp en las que "mostraron interés en si había algún gay 'por ahí'", en referencia al Monte Tossal, a lo que respondieron que "no" y se concluye: "Normal, los maricas se cagan del toque de queda tt", "Ya jajajajaj", "Hoy vamos a las ocho; y llasta". El magistrado considera que "solo muestra la burla y menosprecio hacia los gays, pero nada más".
Hay 16 declaraciones de testigos relacionadas con esta agresión homófoba. La intención ahora es apelar ante la Audiencia Provincial para que la sentencia sea declarada nula y vuelva a celebrarse con otro magistrado.