Kala y Keira tienen una segunda oportunidad gracias a Internet y las redes sociales por una foto publicada por la protectora estadounidense "Angels Amoung Us Pet Rescue" en la que las dos perras parecen abrazarse con una expresión triste unas horas antes de ser sacrificadas.
Los canes no encontraban un hogar, por lo que iban a ser eutanasiados. En un último intento, la protectora decidió colgar esta imagen en Facebook para encontrarles un dueño que pudiera hacerse cargo. La imagen iba a acompañada de un texto, en primera persona, como si las dos perritas fueran las que pidieran ayuda:
"Soy Kala. Esta es Keira. Aquí estamos muy asustadas. La gente que trabaja en estos refugios ve lo asustadas que estamos. Y nos han dicho que hoy es nuestra fecha límite. Necesitamos encontrar alguien que nos rescate o seremos 'las siguientes'. Keira es negra, no es 'un boxer real', solamente una mezcla [...]. Puedes ver nuestras caras. Keira sabe qué es lo que va a pasar. Puedes verlo en sus ojos. Estoy segura de que está intentando hacerse la valiente, pero puedo sentir como su corazón late cada vez más deprisa. Si nadie nos salva, alguien nos separará. La veré irse y no volverá. Lloraré. Después vendrá a por mí, y yo no seré tan valiente. Nos ayudamos la una a la otra mientras estamos aquí. Ella me ha dado esperanza cuando yo no tenía ninguna".
El salvador
La emotiva publicación corrió como la pólvora en Facebook, siendo compartida por más de 10.000 personas, y así fue como Kala y Keira se salvaron de una muerte casi segura. Dos horas y seis minutos después de la llamada de auxilio los perros ya tenían dueño.
"¡Están a salvo!", publicó la protectora junto con una imagen del hombre que, conmovido por la historia de Kala y Keira, se acercó a hacerse cargo de los dos animales. "Gracias por compartir, donar y por vuestras propuestas", decían desde el refugio y añadían: "Esto es el motivo por el que salvamos".
El acto del joven dejó una estampa completamente distinta a la original. Kala y Keira ya no aparecen hechas un ovillo la una sobre la otra, temerosas por su futuro. En la nueva imagen aparecen besando a su nuevo dueño, una a cada lado del chico.