Dos grandes guerras quedan por librar en Poniente: una contra los temidos caminantes blancos y otra por el ansiado Trono de Hierro. Las facciones ya están configuradas y mientras Jon Snow se prepara para defender el Muro de los muertos a la par que se erige como Rey del Norte; Cersei Lannister ha conseguido colocarse la corona de los Siete Reinos; y Daenerys Targaryen se dirije a Desembarco del Rey para recuperar lo que le pertenece, acompañada de tres dragones y un imponente ejército.
Sin embargo, en el tablero de Poniente hay más personajes dispuestos a llegar a lo más alto. Meñique, Jaime Lannister, Gendry (que sigue remando), Tyrion o Sansa son otros grandes candidatos al trono. Desde Los Replicantes abanderamos la causa Stark y apoyamos a la pelirroja más sufridora de 'Juego de Tronos'. Y si no lo tienes muy claro, aquí van ocho razones:
1 Porque es el personaje que más ha evolucionado
Santa Stark comenzó siendo una damisela que soñaba con castillos y príncipes azules. Su carácter era caprichoso y bastante odioso, pero en Desembarco del Rey aquellos anhelos se transformaron en pesadillas para introducirla en un juego de adultos en el que ella se convirtió en moneda de cambio. Alejada de su familia y rodeada de una corte hostil dominada por los Lannister, aceptó su destino para sobrevivir. Lo que para muchos fue una muestra de debilidad, en realidad se trató de una postura inteligente que le ha permitido continuar con vida.
De manera discreta fue ganando adeptos a su causa dispuestos a ayudarla en su periplo. Así, contó con el respeto de Tyrion Lannister y con la comprensión de los Tyrell. Con la ayuda de Meñique, consiguió escapar de las garras de Cersei Lannister y Joffrey Baratheon para pasar a las del personaje más inteligente de 'Juego de Tronos'. Obsesionado con ella, Petyr Baelish volvió a utilizarla en función de sus intereses, pero gracias a esto, Sansa comprendió que formaba parte de un tablero del que no podía escapar.
Vendida a los Bolton, familia que aniquiló a la suya, la joven Stark se convirtió en la esposa del sádico Ramsay. Fue en este momento cuando, por fin, tomó las riendas de su vida para marcar su propio destino. Escapó de su propio hogar y tras reencontrarse con su hermano Jon Snow, consiguió unir a todo el Norte para ir a la guerra y recuperar Invernalia.
2 Porque es una Stark
No cabe duda de que los Stark es la familia más maltratada por la pluma de George R. R. Martin. Desde que Ned Stark acudió a Desembarco del Rey acompañado por sus hijas dejando atrás Invernalia, los guardianes del Norte nunca se han vuelto a reunir. Y esto ya resultará del todo imposible.
Ned Stark, Catelyn, Robb y el pequeño Rickon han pagado con sus vidas las luchas por el trono de hierro, y Sansa se configura como la única capaz de resarcir su apellido. Mientras que Arya Stark ha optado por la venganza y Bran se encuentra inmerso en su camino de la verdad, la pelirroja ha conseguido construir su camino al trono.
3 Porque representa el empoderamiento de la mujer
Si hay un personaje sufridor en 'Juego de tronos', este es Sansa Stark. Desde el comienzo de la ficción, la joven tuvo que aguantar los desprecios de su prometido, Joffrey Baratheon, y los desplantes de la reina de Poniente. Su primer gran golpe llegó al final de la primera temporada cuando, a pesar de haber negociado ella misma el perdón de su padre, tuvo que ver en primera fila cómo le cortaban la cabeza.
Convertida en rehén, continuó sometida a todo tipo de humillaciones en Desembarco del Rey mientras su madre y su hermano mayor eran asesinados por aquellos que la retenían. Casada a la fuerza con Tyrion Lannister, se vio obligada a huir al ser acusada del asesinato de Joffrey. En manos de Meñique consiguió algo de seguridad aunque tuvo que hacer frente a los desequilibrios de su tía Lysa Arryn en Nido de Águilas.
Su calvario más duro comenzó en la quinta temporada cuando Meñique la entregó a los Bolton, familia que había arrebatado Invernalia a los Stark tras una traición que costó la vida a Catelyn y Robb. Tuvo que casarse con el perturbado Ramsay Bolton, quien la sometió a todo tipo de violaciones y torturas. Ante semejante panorama, tuvo que fugarse de su propio hogar llevándose consigo a Theon Greyjoy, perdonándole así por haber traicionado a su familia.
La joven Stark ha sido una mujer maltratada desde el momento en el que puso un pie en Desembarco del Rey. Sin ayuda de nadie, ella sola ha tenido que romper sus cadenas mientras se ha adaptado a entornos extremadamente hostiles y peligrosos.
4 Porque lo ha perdido todo y no teme morir
Sansa Stark anhelaba ser reina de los Siete Reinos pero poco a poco lo fue perdiendo todo. Pronto tuvo que renunciar a sus sueños mientras veía cómo aniquilaban a su familia. Su padre, su madre y su hermano mayor fueron asesinados perdiendo así su hogar, Invernalia.
Cuando consiguió regresar al norte, lo hizo siendo prácticamente una propiedad de los Bolton al contraer matrimonio con Ramsey. Violada la noche de bodas, perdió también su virginidad. Habiéndole arrebatado todo, la joven Stark llega a un punto de no retorno cuando, en su huída, acepta morir. "Si voy a morir, que ocurra al menos mientras aún queda algo de mí", le espeta a la amante de su marido cuando intenta cortarle el paso.
De princesita a dama de hierro, Sansa se embarca en una guerra con el objetivo de recuperar su hogar y lo consigue. Acepta, sin embargo, las pérdidas, pues, a sabiendas de que la guerra le costaría la vida a su hermano Rickon, en manos de los Bolton, la asume para hacer que en Invernalia vuelva a ondear el estandarte de los Stark.
5 Porque el norte es suyo
Con Ned Stark sin cabeza, su heredero, Robb, se embarcó en la Guerra de los Cinco Reyes proclamándose Rey del Norte y anunciando la independencia de este territorio respecto a Poniente. Tras perder la guerra fruto de las traiciones, Invernalia pasó a manos de los Bolton, aliados de los Lannister.
Con Robb Stark muerto, la siguiente en la línea sucesoria sería Sansa Stark, y fue ella la encargada de recuperar su hogar. Convenció a su hermano Jon Snow de ir a la guerra y se recorrió todo el norte para conseguir el apoyo de los antiguos vasallos de su familia. Ignorada por los hombres, la pelirroja salvó la contienda cuando parecía que todo estaba perdido llegando por sorpresa con las tropas de los Arryn.
Pese a todo esto, el Norte se postró frente a Jon Snow por el mero hecho de ser un hombre. En un principio, Sansa cede el trono del Norte a su hermano, pero finalmente se da cuenta de que el derecho es suyo. Ella es la verdadera Reina del Norte.
6 Porque es la única que puede con Meñique
Con toda seguridad, Petyr Baelish sea el personaje más frío, inteligente y calculador de 'Juego de tronos' -con permiso de Cersei- . Hace y deshace a su antojo con el objetivo de conseguir su propio beneficio y, aunque siempre ha sabido jugar perfectamente sus cartas, siempre ha tenido un punto débil: Catelyn Stark. A su muerte, Sansa heredó su amor.
Meñique la salvó de las garras de los Lannister tras los sucesos de la Boda Púrpura y de él ha aprendido a jugar al juego de tronos. Entregada a los Bolton por el que creía que era su protector, Sansa abrió los ojos y comprendió que solo se tenía a sí misma. El personaje interpretado por Sophie Turner conoce a Baelysh y, tras su traición, ha aprendido no solo a no fiarse de él, sino a utilizarlo a su conveniencia.
Al final de la sexta temporada, Meñique le promete llegar hasta el trono de hierro con ella. Sansa lo necesitará para conseguirlo, así como a la casa Arryn, fiel a la causa de la Stark. Baelysh también necesita a la joven para esta empresa y ella lo sabe.
7 Porque sabe jugar al juego de tronos
Si algo ha demostrado Sansa Stark es que sabe jugar al juego de tronos y por eso ha conseguido llegar con vida hasta el final de la serie. Su actitud sumisa del comienzo resultó ser una estrategia perfecta para protegerse frente a los Lannister, pero desde la penumbra fue poniendo en orden sus cartas, ganando aliados y aprendiendo de las estrategias de Poniente.
Aunque tardó en imponerse, el arduo camino que ha tenido que recorrer el personaje le ha valido para fraguar una dura personalidad marcada por la justicia, lo que la llevó a recuperar Invernalia.
Meñique está decidido a alcanzar el ansiado Trono de Hierro y quiere hacerlo de la mano de Sansa. Ella nunca se ha planteado un objetivo tan alto, pero sabe que Baelysh podría conseguirlo y, aunque en un principio se ha negado, sabe que las estretegias de su enamorado podrían encumbrarla como Reina de los Ándalos y los Primeros Hombres.
8 Porque sería una sorpresa
Desde que comenzó la serie, tres han sido las cabezas sobre los que ha bailado la corona: Daenerys Targaryen, Jon Snow y Cersei Lannister. La primera siempre ha sido la gran favorita de los fans y es que es un personaje creado para gustar desde el minuto uno. Exiliada, siendo la única superviviente de su estirpe y con tres dragones a su lado, parece tener el trono asegurado.
El bastardo de los Stark resulta ser un claro candidato al trono, especialmente después de la revelación que confirmó la teoría tan extendida sobre sus progenitores: Lyanna Stark es en realidad su madre y Rhaegar Targaryen su padre, convirtiendo a Jon Snow en sobrino de la Madre de Dragones. Muchos quieren que ambos se unan para dominar juntos Poniente.
El tridente de favoritos lo cierra una leona. Cersei Lannister ya ha conseguido sentarse en el Trono de Hierro pese a que esto le haya costado la vida a sus tres hijos. Amada y odiada a partes iguales, ahora deberá defender la corona, aunque no lo tendrá nada fácil.
Pocos se esperan que Sansa Stark llegue tan alto por lo que sería toda una sorpresa. Teniendo en cuenta que la saga literaria se llama "Canción de hielo y fuego", es demasiado evidente que esto va referido a Jon y Denerys, haciendo todo demasiado previsible. ¿Dará Sansa la campanada?