Según un estudio realizado por Idealista en 2019, el 36% de las viviendas en España tienen aire acondicionado. Es probable que esa cifra haya crecido y también que tenga algo que ver con el aumento de la temperatura: los días en los que se han superado los 50ºC se han duplicado desde 1980.
Otro informe, en este caso elaborado por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) (AEMET) sobre el estado del clima en 2020, concluía que el aumento de la temperatura desde la época preindustrial se cifra en alrededor de 1,2 grados en el conjunto del planeta. Es próximo a 2,2 grados en Europa y ronda 1,7 grados en España. En nuestro país, la mayor parte de ese incremento de temperatura (1,3 grados) se ha producido en los últimos 60 años.
Más calor igual a más gasto
Parece que el uso del aire acondicionado va a ser cada vez más recurrente en los hogares debido al aumento de temperaturas, lo que significa un aumento en la factura de la luz. Con datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), compartidos por Kelisto, la utilización de aire acondicionado puede suponer hasta el 70% del consumo eléctrico veraniego.
La utilización de estos aparatos puede implicar un consumo anual de hasta 170 kWh por hogar, lo que supone un 2,3% de la energía total consumida en una vivienda media española.
Por lo tanto, es necesario realizar un buen empleo. Para ello son estos 7 consejos para ahorrar en el aire acondicionado.
1 Temperatura media
La temperatura ideal en verano es entre 22 y 25 grados, mientras que en invierno oscilaría entre los 20 y los 22 grados. No es, ni mucho menos, un asunto que pasar por alto, ya que aseguran que por cada grado que se baje de lo recomendado, el consumo de aire acondicionado aumenta entre un 6% y un 8%.
Además, se recomienda que la diferencia entre la temperatura interior y la exterior no supere los 12 grados.
2 Programar el aire acondicionado
Un buen sistema para ahorrar, y también para cumplir con el consejo anterior, es el de programar el aire acondicionado, sobre todo, para que se apague por la noche y no consuma innecesariamente mientras dormimos. Dormir con el aire acondicionado, "no es la mejor opción, pero si el usuario lo hace, lo mejor es programar las horas de funcionamiento, así evitará un consumo excesivo", según alegan en Selectra, una empresa de comparación de precios de luz.
3 Etiqueta de eficiencia energética
De hecho, es posible tomar medidas de ahorro desde el momento en el que se decide comprar un aparato de aire acondicionado. Es importante comprobar la etiqueta de eficiencia energética del mismo. La mejor opción es decantarse por aquel que tenga una etiqueta A. De hecho, si es A+++, el ahorro de energía será del 40%, según comentan desde Selectra.
4 Ubicación del aparato
También tiene mucha importancia el lugar en el que se coloque el aparato de aire acondicionado. "Lo preferible es que el aparato se instale en una zona con sombra, que no se encuentre cerca de otros aparatos que desprendan calor y que disponga de una buena circulación de aire", señalan desde Kelisto.
5 Aislamiento de la vivienda
Si se quiere maximizar todo lo posible las condiciones para poder ahorrar energía y ser eficiente, cómo de bien aislada esté el hogar es un gran punto. Si la casa está bien aislada, la necesidad de ayuda para mantener la temperatura adecuada será menor. Aislar ventanas y puertas puede llegar a suponer un ahorro de hasta el 30% en climatización. También se recomienda instalar toldos y persianas para evitar que los rayos de sol incidan directamente.
6 Mantenimiento del aire acondicionado
Como cada electrodoméstico, el aire acondicionado también necesita de un mantenimiento. Mantener en buen estado el equipo de aire es sencillo, bastará con limpiar los filtros al menos una vez cada año o 15 meses como máximo. La limpieza puede llevarse a cabo con agua y un producto de limpieza cualquiera. Los filtros no podrán volver a colocarse hasta que no estén completamente secos.
7 Apagar antes de irse
Puede parecer obvio, pero dejarse el aire acondicionado puesto más tiempo no significa que la casa vaya a estar más fría al llegar. Programar el electrodoméstico para que enfríe durante un par de horas antes de llegar al hogar es mejor que dejarlo puesto durante todo el tiempo que estemos fuera. Así, se evitará un consumo innecesario.