El problema de la vivienda en España es de lo más resonado en estos últimos tiempos. Resulta paradójico, ¿no? Que nuestro país tenga cuatro millones de casas vacías que no le sirven para solucionar sus problemas de accesibilidad a la vivienda.
Pues bien, está es la realidad que pone de manifiesto el Banco de España en uno de los apartados del monográfico que dedica el sector en su Informe Anual de 2023.
La nueva ley de vivienda
La nueva normativa de vivienda, que se implementó el 26 de mayo del año pasado, otorga a los ayuntamientos la facultad de aplicar un recargo adicional en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a los propietarios de inmuebles residenciales desocupados sin justificación durante dos años o más.
Este recargo puede variar entre un 50% y un 150% de la cuota del IBI, dependiendo del tiempo de vacancia y la ubicación del inmueble. Cabe destacar que se consideran justificaciones válidas para la vacancia temporal, entre otras, el traslado por motivos de trabajo o estudios, así como el cambio de domicilio por razones de dependencia.
Sin embargo, el Banco de España señala que la capacidad para incrementar la oferta de vivienda mediante la activación de las unidades desocupadas puede ser limitada. Esto se debe a que una parte significativa de estas viviendas se concentra en áreas con menor crecimiento demográfico.
Según datos del mismo documento, casi la mitad de las viviendas desocupadas se encuentran en municipios con menos de 10.000 habitantes, que representan alrededor del 20% de la población total.
Por otro lado, en las ciudades con mayor demanda, como las de 250.000 habitantes, el porcentaje de viviendas vacías es del 7,5% del total de su parque inmobiliario, lo que equivale a unas 400.000 unidades y contribuye al total nacional de cuatro millones de viviendas desocupadas.
Otro problema: dudoso estado
El Banco de España señala que, además de su ubicación, muchas de estas viviendas presentan problemas estructurales, accesibilidad deficiente o bajos estándares de eficiencia energética. Por lo tanto, su movilización requeriría una rehabilitación previa.
En cuanto a la rehabilitación de viviendas en España, el Banco de España indica que su contribución al aumento de la oferta es limitada. Los visados para obras de rehabilitación en 2023 rondaron los 25.000, cifra inferior al promedio de la última década y por debajo de las ratios observadas en otras economías europeas.
Por ejemplo, en Francia alcanzan el 2%, en Alemania el 1,5% y en Italia el 0,8%. El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) de España tiene como objetivo impulsar la rehabilitación de viviendas, proponiendo la renovación de más de 500.000 unidades durante el período de aplicación del plan y alcanzando las 300.000 viviendas rehabilitadas anualmente para 2030.
Sin embargo, el Banco de España advierte que la ejecución de esta iniciativa podría enfrentar obstáculos debido a la escasez de mano de obra cualificada y a que muchas de las viviendas que necesitan rehabilitación se encuentran en zonas con menor demanda.
Críticas del Banco de España
El Banco de España destaca que el crecimiento de los alquileres de temporada ha sido tan significativo que ahora iguala en número a los alquileres vacacionales, llegando a los 350.000.
Entre las razones que podrían explicar este aumento se encuentran los controles de precios del alquiler, los cuales son criticados por el supervisor debido a sus efectos negativos. Entre estos efectos adversos, el Banco de España menciona la reducción de la oferta de vivienda en las áreas reguladas, el desplazamiento del uso de viviendas hacia otros mercados alternativos y una disminución en la calidad de las viviendas debido a un menor mantenimiento.
El supervisor también cuestiona otras medidas adoptadas por el Gobierno, como la protección a los inquilinos, la defensa de los hogares hipotecados, el respaldo fiscal a la demanda y los avales para la compra de vivienda por parte de los jóvenes, señalando sus efectos perjudiciales.
El Banco de España reconoce que los problemas de acceso a la vivienda se han intensificado en los últimos años, afectando principalmente a los hogares con menores ingresos, como los jóvenes y la población inmigrante, y a ciertas áreas geográficas, especialmente las urbanas y turísticas. Esta situación justifica la implementación de medidas políticas.
Sin embargo, advierte que la magnitud del problema hace difícil que medidas aisladas a corto plazo puedan resolver significativamente las dificultades actuales de acceso a la vivienda.
Por lo tanto, el organismo sugiere que las políticas públicas deben tener un enfoque a largo plazo, involucrando a las diversas administraciones responsables de la vivienda y priorizando el estímulo de la oferta de vivienda, especialmente en el mercado del alquiler y el alquiler social.
¿Qué proponen los partidos?
Dicho esto, nos interesa averiguar qué soluciones plantean nuestros políticos. Existen varias propuestas de los principales partidos políticos en España para abordar el problema de la vivienda. Aquí establecemos una descripción más detallada de sus enfoques:
Estas propuestas reflejan diferentes visiones y enfoques para abordar la crisis de la vivienda en España, y su efectividad dependerá de su implementación y de las circunstancias económicas y sociales del país.