Telecinco estrenó este martes por la noche un programa de nivel, uno de esos especímenes que nunca entiendes en qué momento se puso encima de la mesa de un directivo de televisión y este decidió que era una gran idea. Un 'España pregunta, Belén responde', un reality de famosos que aprenden a saltar a una piscina, una serie de dos gemelos interpretados por Resines o un 'OT' presentado por Pilar Rubio, por hacer algunas analogías.
El punto de partida de '26J. Quiero gobernar' es que cuatro niños moderados por Ana Rosa Quintana entrevistan a los candidatos a convertirse en Presidente en las elecciones del próximo 26 de junio. Asimilado esto (tómate tu tiempo), hay una serie de preguntas que nos asaltan nada más comenzar el programa.
La primera. Niños entrevistando a un famoso, Bertín Osborne con programa propio. ¿Cuándo se convirtió Telecinco en Canal Sur?
La segunda. Si el primer entrevistado era Pablo Iglesias, ¿por qué no estaba Errejón entre los niños preguntones?
Ah, ahí está.
La tercera. ¿Cuál de todos sus enemigos ha maquillado a Ana Rosa Quintana?
La cuarta. ¿Es que Ana Rosa no se sabe el alfabeto?
Muy bien, una vez sentadas las bases del programa, entremos en materia. Pablo Iglesias fue el primero de los cuatro candidatos en enfrentarse a las preguntas de los niños y a las risas enlatadas que el programa puso por encima para que todo pareciese mucho más gracioso de lo que en realidad era.
Antes de comenzar la ronda de preguntas, Ana Rosa (o su becaria) se cogió la cámara y se fue por los colegios más uniformados de la geografía española, donde los pequeños, nada aleccionados por sus padres o el programa, identificaron a Iglesias como 'el coletas' y dijeron que era "un maleducado" por no llevar corbata, algo que su uniforme escolar sí les exige. El programa empezaba fuertecito.
El vídeo dio paso a los niños entrevistadores. Momento culo torcidísimo con el niño al que le gustaban el fútbol y los toros "por su abuela y por su tío", algo que le pareció estupendísimo a AR. Segundo momento culo torcidísimo con el niño que decidió presentarse en inglés.
La pequeña Irene, eso sí, dio con la clave por la que se organizan elecciones: "Sino los otros políticos se quedan sin gobernar, entonces cada año gobierna uno". Eso sí es una definición del bipartidismo político, y lo demás son tonterías.
No habían ni transcurrido unos segundos cuando la pequeña Irene volvía a abrir la boca para explicar por qué le gustaba el PP y sentar una nueva cátedra: "Me gusta el PP porque su símbolo es de mi color favorito". Como tantos otros votantes, vaya.
Su amigo el de azul, en cambio, se decantaba más por Albert Rivera, porque "está siempre con los niños, hace cosas para los niños, siempre se divierte con los niños". Y lo dejamos ahí.
El momento de la entrada de Iglesias se producía para alegría de Luna, su joven fan, que aplaudió como el conejito Duracell. A los muchachos no les hizo mucha gracia y se quedaron atónitos, ya que se habían dedicado a ponerlo a parir sin saber que iban a conocerlo.
Eso sí, los pequeños tardaron poco en cambiarse de chaqueta. "Visto así de cerca parece majo", decían con la boca pequeña, dejando caer que les habían lavado el cerebro. Mientras tanto, Ana Rosa les picaba a ver si alguno de ellos les acusaba de comunistas. "Tú qué decías, ¿que Podemos le quitaba el dinero a los bancos", preguntaba a Irene, la niña sabia. "¡Yo no decía nada!", se rebelaba la pequeña oráculo.
Al niño taurino le invadía rápidamente el azul del polo que llevaba y le preguntaba que por qué quería quitar los toros, aunque Iglesias se salía por la tangente y abogaba por un debate social, a la vez que se mostraba contrario al Toro de la Vega. Acto seguido, contraatacaba y le preguntaba que por qué se llevaba tan bien con Nicolás Maduro, algo que aprovechaba Iglesias para contar que realmente nunca se habían conocido.
Álvaro, que así se llamaba el niño, siguió su particular cruzada: "¿Te molesta que en vez de 'Podemos' la gente diga 'Potemos'?", "dicen que quieres quitar la Semana Santa", a lo que Iglesias acabó explotando, "¡la de cosas malas que se dicen de nosotros!".
El Iglesias más puretilla también afloró cuando se puso a contar batallitas de cuando era pequeño y se utilizaban casettes y se jugaba a las chapas. Hay que reconocer que no se desenvuelve tan bien entre los infantes como entre los periodistas de 'laSexta Noche'.
Para terminar el programa, una versión en miniatura de Iglesias le visitaba y, haciendo un tremendo esfuerzo por amar a los niños, le proponía repartirse las funciones políticas: "Que hay que reunirse con Rajoy, vas tú. Que hay que ir a la final de la Champions, voy yo". El líder de Podemos aprovechó un entorno tan azucarado para confesar que de pequeño era rubio y con pecas y que quería convertirse en jugador de baloncesto.
Al día siguiente, Rivera era recibido por los niños provocando todo tipo de reacciones: desde la niña que necesitaba ir al baño hasta el otro al que le picaba la nariz. Cuánta guasa.
"Jo, me pica la nariz". El programa de los niños politizados nos sigue dejando muy locos https://t.co/Dte95NSR6wpic.twitter.com/ycB0zZ9YMT
? Los Replicantes (@los_replicantes) 2 de junio de 2016
Estas primeras entregas estuvieron centradas en Pablo Iglesias y Albert Rivera, pero Pedro Sánchez y Rajoy también tendrán su propia entrevista con niños.
