El terrorismo no entiende de treguas. La última región afectada por un ataque yihadista ha sido Bir al Abed, una zona que se encuentra a 40 kilómetros al oeste de la ciudad de El Arish, en Egipto. Según los medios del país, hay al menos 235 muertos y 120 personas heridas tras la explosión de una bomba en los alrededores de una mezquita repleta de fieles. Cuando los supervivientes intentaban huir, los terroristas abrieron fuego indiscriminadamente para terminar este terrible acto y causar el mayor daño posible, según declararon testigos a la edición digital del diario Al Ahram.
Fuentes de seguridad y del Ministerio de Sanidad de Egipto han sido los encargados de ofrecer los datos a la prensa. El templo musulmán Al Raudá, simpatizante con el rito moderado sufí, se ha visto sumergido en el terror cuando se ha detonado el artefacto puesto por los yihadistas. Los sucesos ocurren en viernes, día sagrado de rezo y cuando más fieles se acercan al lugar.
Los servicios de emergencia trataron de evacuar a todas las personas que aún continuaban con vida hacia los hospitales de la zona en medio de un tiroteo entre las fuerzas del orden y los terroristas. El despliegue de seguridad puesto en marcha en la zona alcanzó unas dimensiones extraordinarias. Numerosos soldados que se encontraban realizando el servicio obligatorio para calmar las tensiones de la zona se encuentran entre las víctimas mortales.
El presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, convocará una reunión enmarcada dentro del comité de seguridad del país para abordar esta grave situación, según informaba la cadena privada Extra News TV y recogía la BBC británica. Asimismo, el gobierno egipcio ha declarado tres días de duelo, según informa Reuters.
La mano del ISIS
La zona es especialmente conflictiva desde que el presidente electo Mohamed Morsi (Hermanos Musulmanes) fuera derrocado por el golpe de Estado del Ejército en julio de 2013. Los milicianos de la Provincia del Sinaí pertenecen al ISIS y pertenecen a su agrupación terrorista islámica local.
Desde que los militares se hicieran con el poder civil, los terroristas no han cesado en sus ataques a este estamento de la población, así como a policías y a la población en general para sembrar el caos y el terror. También los turistas de El Cairo y el valle del Nilo, así como la comunidad cristiana copta, han sufrido graves ataques terroristas en los últimos años.
Numerosos cristianos huyeron el pasado mes de febrero de El Arish, la región donde se ha producido este monstruoso atentado, después de que se vieran atacados por los terroristas de manera incesante. Hace dos años, una explosión en un avión ruso provocó que el aparato se estrellara en el Sinaí. Tenía 224 personas en su interior entre pasajeros y tripulación. No hubo ningún superviviente.
Los yihadistas locales prometieron lealtad al Estado Islámico en 2014. Asimismo, establecieron la Provincia del Sinaí del Califato justamente en la península que limita con Israel y Gaza. Esta zona se quedó casi desmilitarizada después de que las tropas de Israel la abandonaran para poner fin a la invasión que se mantuvo en la zona entre 1967 y 1979, cuando se lograron unos acuerdos de paz.