Bill y Melinda Gates han anunciado su divorcio después de estar casados durante 27 años. Eran una de las parejas más ricas del mundo. Su fortuna asciende hasta los 146 mil millones de dólares, unos 120 mil millones de euros. La separación de los bienes ya se habría llevado a cabo gracias a un acuerdo de separación que firmaron no hace mucho, según ha publicado TMZ.
El matrimonio lanzó un comunicado el pasado lunes 3 de mayo anunciando que el amor entre ellos dos se había acabado. "Durante los últimos 27 años, hemos criado a tres niños increíbles y hemos creado una fundación que trabaja alrededor de todo el mundo para favorecer que todas las personas tengan una vida sana y productiva".
Cifras estratosféricas
Los Gates tienen 3 hijos mayores de edad, Jennifer, Rory y Phoebe y residen en su increíble mansión en el estado de Washington. Además de ser ellos multimillonarios, crearon la Fundación filantrópica de Bill y Melinda Gates en el año 2000. En 2014 se estimó que habían donado a la fundación 28 mil millones de dólares.
En la actualidad, la cifra es mucho mayor. La Fundación Gates donó 250 mil millones de dólares a finales del 2020 para acabar con la pandemia del Covid-19. Ahora se estima que los Gates tienen como patrimonio más de 120 mil millones de euros.
Los documentos de divorcio a los que ha podido acceder TMZ revelan que la pareja no tiene ningún acuerdo prenupcial, solo el acuerdo de separación que firmaron recientemente. En él, Melinda no ha solicitado ningún tipo de pensión y es casi seguro que el caso se resuelva sin necesidad de acudir a juicio.
Sin embargo, todavía no se sabe qué le corresponderá a cada uno. Hay que recordar que la riqueza de los Gates comenzó en Microsoft, aunque ahora solo son un 20% de sus activos. El mayor activo es Cascade Investmen, una sociedad que creó Bill Gates gracias a las ventas de acciones de Microsoft.
La abogada de familia de la firma McKinley Irvin en Washington, Janet George, dijo a Bloomberg que el reparto de los bienes no tiene por qué ser un "50-50 obligatorio". "Los tribunales pueden otorgar más o menos, dependiendo de lo que sea justo y equitativo", dijo. Sea como sea, es muy probable que el público nunca sepa cómo se reparten la fortuna porque se puede ocultar detrás de contratos privados.