A nivel general, el universo de las series de televisión se ha ampliado de forma significativa en los últimos años con motivo del auge de las plataformas de vídeo bajo demanda. Con el objetivo de diferenciarse de la competencia, muchas de estas compañías optan por desarrollar sus propias producciones, contenido exclusivo que se convierte en un aliciente para atraer nuevos suscriptores y tratar de fidelizar a los clientes.
Como resultado, los espectadores nos encontramos ante una gran cantidad de títulos a nuestro alcance, series que no siempre logran el respaldo de la crítica y el público. Muchas veces el motivo de no alcanzar un buen resultado se debe a una historia mediocre y poco interesante, un montaje sin ritmo o unas interpretaciones que dejan mucho que desear. Con motivo del final de año, queremos realizar nuestro tradicional listado con aquellas ficciones que no han conseguido convencer y que se han ganado a pulso entrar de lleno en el ranking de peores series del 2020.
1 'Por trece razones'
El éxito de la primera temporada de 'Por trece razones' motivó que la serie continuase en emisión durante varias temporadas más y, quizá, ahí radica el principal problema de esta ficción. Cuando se intenta estirar el chicle no siempre se acierta y muchas veces lo que se consigue es desmerecer todo el trabajo y el esfuerzo que se puso en esa primera tanda de episodios. En su cierre definitivo, esta ficción original de Netflix se vuelve mucho más tediosa y cada episodio parece que dure una eternidad. La estructura narrativa es un conjunto de tramas que carecen de sentido y tampoco generan ningún tipo de emoción o tensión como si lograron en los inicios de la serie. El producto final parece hecho con prisas y sin prestar atención absolutamente a nada, dejando que el desarrollo de la historia y de los personajes roce el despropósito.
2 'Por H o por B'
Original de HBO España, 'Por H o por B' es una comedia que intenta hacer humor a raíz del contraste y de las diferencias culturales entre dos mundos sociales completamente distintos. La intención parecía buena y el esfuerzo es de agradecer, pero no se consigue el objetivo buscado. Además, las tramas cuentan con demasiados tópicos y diálogos un tanto forzados. Así pues, el resultado obtenido es una comedia simplona formada a partir de chistes y gags que buscan la risa fácil, propósito que solo se consigue en alguna que otra ocasión. No obstante, se trata de una ficción con un visionado sencillo. Asimismo, su mayor logro está en sus personajes carismáticos, aunque tampoco cuentan con un desarrollo muy complejo y a veces pecan de exageración y pierden cierta credibilidad.
3 'Alta mar'
Cuando 'Alta mar' se estrenó en el 2019 se presentó como un drama interesante, sin embargo, con el transcurrir de los episodios ha ido perdiendo todo ese potencial inicial. La tercera temporada estrenada este año marcaba el desenlace de la serie y, lejos de concluir de forma efectiva, ha mostrado un final muy predecible y precipitado con tramas que a veces resultaba incoherentes. Las nuevas incorporaciones tampoco han sido un acierto y, lejos de aportar frescura, credibilidad y mayor interés, terminan siendo un lastre para el transcurrir de la historia. Además, la serie pierde intriga y misterio cuando se acerca al último tramo.
4 'Emily en Paris'
Los amantes de las comedias románticas tenían en 'Emily en París' una oportunidad para disfrutar de una buena ficción, sin embargo, la serie se queda en un quiero y no puedo constante. De hecho, cuando parece que va a remontar el vuelo, finalmente termina siendo un producto mediocre. Uno de sus principales problemas es su protagonista, rol encarnado por la actriz Lily Collins. Se trata de un personaje que se queda plano y que no tiene el carisma suficiente para poder soportar todo el peso que tiene en la serie. Además, la ficción bebe constantemente de tópicos mil veces vistos y que no aportan nada interesante. Su único punto fuerte es el contexto, es decir, el ambiente en el que se desenvuelve Emily, aunque el uso constante de clichés hace que muchas veces prime lo excéntrico, consiguiendo que el conjunto final sea un tanto caricaturesco.
5 'Valeria'
La adaptación de las novelas escritas por Elisabeth Benavente se encontraba entre una de las series originales de Netflix más esperadas por los espectadores, sin embargo, 'Valeria' no ha logrado estar a la altura de lo esperado. La ficción mantiene la esencia en lo que respecta a la historia de amistad, amor y trabajo, pero no se profundiza demasiado en estos temas y la serie en general carece de elementos sorprendentes y tramas interesantes. Además, el ritmo que sí tienen las novelas originales se pierde por completo, por lo que, al final, la estructura narrativa de la serie resulta bastante plana y sencilla, incluso en ocasiones se vuelve un tanto incoherente. Además, los personajes tampoco tienen un buen desarrollo ni están suficientemente definidos, por lo que cuesta empatizar con ellos y creerse sus historias.
6 'Space Force'
Protagonizada por Steve Carell, 'Space Force' aterrizaba en Netflix con la intención de convertirse en una sitcom de referencia emulando a grandes comedias como 'The Office', en la que precisamente participó Carell. Sin embargo, el éxito no ha sido para nada el esperado y la serie se ha quedado a medio gas. El humor se sustenta en una serie de gags que no terminan de encajar a la perfección y que buscan el camino fácil hacia la comedia. Lo mismo sucede con algunos de sus personajes, que resultan demasiado exagerados en el contexto en el que se mueven y se convierten en elementos que desentonan. Además, a veces genera una sensación de frustración porque te deja con ganas de más, es decir, con la sensación de que va a llegar ese momento en el que por fin va a conseguir despegar y sorprender, pero nunca se alcanza ese objetivo.
7 'Katy Keene'
Los amantes de 'Riverdale' recibía la buena nueva del estreno de 'Katy Keene', spin-off centrado en el personaje de Josie y en sus aventuras en la ciudad de Nueva York. El primer episodio de la serie no tiene mala pinta, incluso parece que los números musicales aportan alegría e invitan a continuar viendo la ficción, sin embargo, cuando avanzan los capítulos descubrimos que no termina de profundizar en los temas tratados y pierde interés. Visualmente sigue siendo llamativa, pero el esfuerzo puesto en el envoltorio se pierde cuando entras a analizar las tramas y los personajes y observas que falta un mejor desarrollo y una apuesta más sólida en su estructura narrativa. De este modo, el resultado es un producto amable, pero banal y fácilmente olvidable, de hecho, pocos la echarán de menos tras su cancelación.
8 'Avenue 5'
Teniendo a Hugh Laurie como protagonista y al creador de 'Veep' detrás de cámaras, 'Avenue 5' tenía muchas papeletas para ser una de las mejores series del año o, por lo menos, para convertirse en un producto divertido y muy disfrutable. Sin embargo, la falta de cohesión entorpece una historia que no deja de ser entretenida, pero que carece del desarrollo y la profundidad necesarias. Algo similar ocurre con el entorno en el que se desarrolla la serie, una ambientación que a veces resulta escasa e incluso poco cuidada y que ofrece la sensación de que no ha sido lo suficientemente aprovechada. Por tanto, aunque es un producto original, no posee la brillantez que se esperaba.
9 'Ragnarok'
El universo de las series de adolescentes se ampliaba con la llegada de 'Ragnarok', una producción danesa y original de Netflix que pretendía unir drama y ciencia ficción. Sin embargo, el resultado ha sido un drama tedioso con un guion con giros cuestionables y que no se sostiene en muchas ocasiones. La estructura narrativa tampoco es muy compleja y a veces se pierde en la mezcla de géneros, cayendo en un humor no buscado cuando la situación requería un mayor nivel de tensión o incluso de dramatismo. Además, es mucho más pretenciosa de lo que al final consigue. Su sobriedad, la ambientación, los escenarios y la belleza de la mitología nórdica no son suficientes para sostener este drama adolescente que no ha logrado destacar en un mercado copado de éxitos.
10 'Run'
La relación y la química entre los protagonistas de 'Run' son el punto fuerte de esta ficción. Ambos personajes principales acaparan toda la atención, pero su trabajo no es suficiente para salvar la serie. Aunque la labor actoral es más que digna, los personajes no gozan de suficiente profundidad ni de un desarrollo a la altura. Asimismo, la historia y las tramas se pierden en giros enrevesados que a veces resultan difíciles de entender. Del mismo modo, el misterio que envuelve a la serie tampoco posee la fuerza suficiente. En lo que respecta a su ejecución, también deja mucho que desear, sobre todo porque podría haber sido una película o una miniserie en lugar de una serie completa y, de esta forma, quizá habría sido mucho más interesante.
