Para bien y para mal, la figura de la madre en el cine es algo que siempre ha estado presente. Si pasamos a ahondar en los distintos géneros, existe uno en el que dicho arquetipo ha nadado a sus anchas a lo largo de los años, y ese es sin duda el del melodrama, de donde nacen la gran mayoría de los tópicos y clichés cinematográficos que han acompañado a la representación de la madre en el cine.
Con un fuerte arraigo en las teorías del psiconálisis y en los mitos griegos, a través de otros géneros que tienen que ver con el fantástico hemos podido comprobar también que la madre como tal, no tiene porqué estar ligada al aspecto benefactor que la maternidad representa. Con la Sra. Voorhees de 'Viernes 13' o la Reina Alien de 'Aliens: El regreso' como algunos de sus ejemplos, queda claro que si partimos de la base de que madre no hay más que una, el cine ya se ha encargado de darnos una lista inmensa de representaciones desde hace décadas.
A continuación, y creando un abanico de personalidades tan variopinto como lo son los títulos seleccionados, recordamos a diez de las madres más míticas que nos ha dado la historia del cine, en ejemplos que nos llevan desde el melodrama clásico a la épica y la comedia, pasando por historia de autor absolutamente dramáticas y presentando sus vertientes más oscuras y cínicas. Porque seguro que todas y cada una de ellas, han reflejado en alguna ocasión algún momento en las vidas de nuestras santas madres.
1 Stella en 'Stella Dallas'
Hablar de la figura materna en el cine sin tener en cuenta a la Barbara Stanwyck de 'Stella Dallas', sería un sacrilegio imperdonable. Estrenado en 1937, el melodrama dirigido por King Vidor, nominado al Oscar hasta en cinco ocasiones (no sería hasta 1979 cuando recogería su estatuilla honorífica), y basado en la novela homónima de Olive Higgins Prouty, ya había sido llevado al cine en 1925 de la mano de Henry King.
Stanwyck, nominada al Oscar a la Mejor Actriz por su rol de madre coraje, se puso en la piel de la Stella del título, una mujer que estará dispuesta a todo por conseguir el bienestar de su hija, Laurel (Anne Shirley, nominada al Oscar en la categoría de Actriz Secundaria), aunque ello suponga apartarse totalmente de su vida en un film que retrata de forma sublime el difícil ascenso entre clases sociales.
2 Ma Joad en 'Las uvas de la ira'
Surgida de la mente del escritor John Steinbeck (ganador del Pulitzer por la novela en la que se basa), en 1940 John Ford plasmó en pantalla uno de los mayores arquetipos del matriarcado en el cine.
Ma Joad no solo venía a ser el reflejo de todas aquellas mujeres que se convirtieron en el reflejo de la Gran Depresión, sino que la actriz Jane Dorwell pasó a ser un claro exponente de la madre fordiana, la cual sirvió como máximo contraparte al personaje encarnado por Henry Fonda en esta épica road movie.
3 Sra. Bates en 'Psicosis'
Continuando con los arquetipos de la madre en el cine, no fue hasta 1960 cuando irrumpió uno de los que más ríos de tinta han hecho correr a lo largo de la historia. Inspirándose en la novela de Robert Bloch, Alfred Hitchcock daba una vuelta de tuerca al cine de terror con 'Psicosis' y uno de los twist finales más míticos del celuloide.
Porque no importa que la Sra. Bates acabe siendo lo que se conocería como la "madre disecada", una de las personalidades del desquiciado de Norman Bates (Anthony Perkins), dueño voyeur del motel de carretera donde se desarrollará gran parte de la película, convertido en escenario del horror y en uno de los lugares comunes del cine de género. Desde el psicoanálisis de Freud y Jung, la Sra. Bates no es otra cosa que la clara representación del eterno mito de Edipo adscrito a la figura del psychokiller. Desde la teoría del cine, acabó siendo una de las máximas representaciones de la madre terrible cinematográfica.
4 Rosemary Woodhouse en 'La semilla del Diablo'
Siguiendo con el cine de terror, donde tantas representaciones ha tenido la figura de la madre, en 1968 llegaba uno de los ejemplos más recordados, pese a que estemos ante un caso de madre que acaba ejerciendo como tal en contra de su voluntad.
Roman Polanski adaptaba la novela de Ira Levin, 'Rosemary's baby' (cuyo título tradujeron aquí a modo de spoiler) y nos presentaba a John Cassavettes y Mia Farrow como la joven y feliz pareja compuesta por Guy y Rosemary Woodhouse, quienes tras mudarse a un exclusivo edificio de apartamentos verán (ella, sobre todo) como sus extraños vecinos están extrañamente interesados en seguir de cerca el reciente embarazo de la joven, quien resultará estar gestando al mismísimo Anticristo en su interior.
5 Aurora Greenway en 'La fuerza del cariño'
James L. Brooks conseguía en 1983 tres Oscar (Mejor Película, Dirección y Guion Adaptado) por 'La fuerza del cariño', título basado en la novela de Larry McMurtry con la que Shirley MacLaine y Jack Nicholson también recibieron sus estatuillas, reconociendo sus labores como Mejor Actriz y Mejor Actor Secundario.
A modo de comedia dramática, el film nos presentaba la historia de Aurora (MacLaine) y Emma Greenway (Debra Winger), madre e hija de carácteres diametralmente opuestos que con el paso de los años conseguirán establecer una relación idílica entre ellas, basada en el respeto y la confianza que les otorga una felicidad que se verá truncada cuando Emma sea diagnosticada con un cáncer terminal.
6 Sarah Connor en 'Terminator 2: El juicio final'
Teniendo en cuenta aquello de que madre no hay más que una, en 1984 James Cameron ya había tenido claro que Linda Hamilton, la idónea para convertirse en la progenitora del salvador del futuro, tenía que ser aniquilida por los robots con el único fin de no dar a luz a John Connor, el líder de la resistencia una vez las máquinas decidan dominar el mundo.
En 'Terminator 2: El juicio final', traumatizada por culpa de su primer encuentro con un Terminator años atrás, Sarah Connor permanece recluida en un centro psiquiátrico. Habiendo adoctrinado a su hijo (Edward Furlong) en aspectos de supervivencia con la intención de hacer frente a una nueva y posible llegada de amenazas del futuro. Será este quien con la ayuda de un ejemplar mejorado de T-800 (Arnold Schwarzenegger) acuda al rescate de su progenitora, a quien le sigue la pista un despiadado T-1000 (Robert Patrick), y la cual pasará a convertirse en toda una badass y madre que todo el mundo hubiera soñado tener, porque nadie mejor que Hamilton ha lucido esas gafas de sol.
7 Beverly Sutphin en 'Los asesinatos de mamá'
Riéndose de la idílica estampa de la familia estadounidense, en 1994 John Waters ponía el dedo en la llaga en la institución de la familia y se reía de forma mordaz de la sobreexposición a los medios de comunicación y del sensacionalismo.
Pese a ser un papel para el que no se pensó en ella como primera opción (se barajaron nombres como los de Meryl Streep, Kathy Bates o Susan Sarandon, entre otros, para interpretarla), a día de hoy es difícil imaginar 'Los asesinatos de mamá' sin la total entrega de Kathleen Turner, quien otorgó a Beverly Sutphin de un aura inimitable como mamá asesina, una adorable ama de casa que, tras su fachada de perfección, esconde a una despiada asesina en serie que acabará siendo la sensación del vecindario y a quienes sus hijos no dejarán de idolatrar.
8 Manuela en 'Todo sobre mi madre'
Almodóvar no solo conseguía con 'Todo sobre mi madre' el Oscar a la Mejor Película de Habla de Inglesa, sino que era la puerta definitiva a que el cine del manchego se convirtiese en objeto de culto en todo el mundo, traspasando así fronteras.
Habiendo sido reconocido su trabajo en Cannes, el realizador construyó para su decimotercer largometraje uno de los mejores papeles para Cecilia Roth. Siguiendo todos los caminos del melodrama propios del cineasta, Manuela será una madre que verá morir a su hijo el mismo día de su cumpleaños, cuando este corra para hacerse con un autógrafo de su actriz favorita, Huma Rojo (Marisa Paredes). Envuelta en dolor y pena, Manuela viajará hasta Barcelona con la intención de encontrarse con el padre.
9 Grace Stewart en 'Los otros'
En el 2001 y volviendo a poner de moda el terror de corte gótico, Alejandro Amenábar presentaba 'Los otros', título que bebía de las historias de fantasmas de Henry James y cuya acción nos llevaba hasta un caserón victoriano en el momento en el que la Segunda Guerra Mundial ya había llegado a su fin.
Allí, Grace (Nicole Kidman) dejará bien claro a los nuevos sirvientes las normas que deben seguir por el bien de la salud de sus hijos, afectados por una rara enfermedad que nos les permite ser tocados por la luz del sol. A medida que ella se desvive por el regreso de su marido soldado, acabará convertida en todo un ejemplo de madre sufridora, clásico arquetipo del cine de terror que años más tarde repetiría Belén Rueda en otro título de género español, 'El orfanato'.
10 Eva Khatchadourian en 'Tenemos que hablar de Kevin'
Basándose en la novela de Lionel Shriver, en 2011 Lynne Ramsay llevaba a la gran pantalla 'Tenemos que hablar de Kevin', título que acabó convertido en una de las grandes sensaciones del cine indie en su momento.
En ella, Tilda Swinton es la encargada de interpretar a Eva, una mujer que parece tenerlo todo en la vida y que es feliz en su matrimonio y con su trabajo. Sin embargo, todo se truncará cuando tenga a su primer hijo, Kevin, pasados los cuarenta años, y quien con el paso de los años acabará revelándose como un asesino en potencia al que su progenitora intentará comprender cueste lo cueste. Será cuando Swinton y Ezra Miller (el Kevin del título) nos regalen un ejemplar tour de force uno de los mejores dramas psicológicos de los últimos años.